Mi bebé tiene muchos gases

Cuando un bebé es pequeño, su estómago aún es inmaduro y sus intestinos se encuentran en pleno desarrollo, por lo que es normal que la leche o algunos alimentos le provoquen malestares estomacales y le generen gases. Sin embargo, esta no es la única causa. 

Aquí te mostramos las principales razones por las que tu bebé podría presentar gases: 

• Beber la leche muy rápidamente.

Si tu bebé está hambriento, puede llegar a desesperarse y beber de forma apresurada la leche que le proporcionas. Esto genera que no haga pausas entre tragos y, como consecuencia, provoca gases en su estómago. En ocasiones, podría incluso llegar a devolver un poco. 

• EL biberón o el pecho no se ajusta a la boca del bebé.

A la hora de darle biberón o pecho a tu bebé, es importante asegurarse de mantener una adecuada postura para que su boca de adapte correctamente al chupón o a tu pezón, pues, de no ser así, podría tragar mucho aire y esto podría provocarle gases. 

• Intolerancia a ciertos alimentos de tu dieta.

Aun cuando no hay evidencia de esto, en la práctica se suele presentar mucho el caso donde, si estás amamantando a tu bebé y comienza a presentar gases, estos podrían deberse a algún alimento de tu dieta. En dicho caso, podrías probar eliminando, durante algunos días, el consumo de lácteos, frijoles, calabazas, coliflor y brócoli.  

• El bebé llora demasiado.

Si el bebé llora fuertemente y durante un largo periodo de tiempo, puede ingerir mucho aire, lo que le generará gases. 

• Incorrecta preparación de la leche de fórmula.

Si alimentas a tu pequeño con leche de fórmula recomendada por tu profesional de la salud, es importante seguir los pasos de preparación correctos, así como permitir que la mezcla se asiente correctamente durante un par de minutos previo a dársela. De no ser así, se pueden formar burbujas que el bebé ingerirá y que le causarán más gases. 

¿Cómo alivio los gases de mi bebé? 

Ahora que conoces lo que podría estar provocando los gases de tu bebé, puedes poner en práctica estos remedios para expulsarlos y aliviar las molestias de tu pequeño: 

• Ayúdalo a repetir.

Unas palmaditas suaves en la espalda son suficientes para hacer eructar a tu bebé. Los eructos permiten que tu peque expulse el aire ingerido al alimentarse o al llorar en exceso.  

• Mantenlo en una postura adecuada.

Ciertas posiciones pueden favorecer la expulsión de gases de tu bebé. Puedes recostarlo boca abajo, sobre tu pecho o sobre tus piernas. 

• Cuida tu dieta.

Elimina los alimentos que podrían provocar gases. 

• Movimientos de bicicleta.

Recuesta a tu bebé boca arriba, toma sus piernas y muévelas como si se tratase de un pedaleo de bicicleta. Esto ayudará a expulsar cualquier gas que tu bebé pueda tener atorado. 

• Haz pausas.

Mientras alimentas a tu bebé, es importante hacer pausas para sacar los gases de su pancita. 

• Calma a tu pequeño mientras llora.

Es recomendable evitar que tu bebé llore demasiado, ya que esto podría favorecer la ingesta de aire. 

¿Cuándo debo consultar al médico? 

Aunque es normal que tu bebé presente gases durante sus primeros meses de vida, si estos se vuelven muy frecuentes y no logras identificar la causa, o si descubres algún otro síntoma como diarrea, vómito o fiebre, es recomendable acudir con el médico para que te indique el diagnóstico correcto.